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Introducción
El estándar puede ser conceptualizado como la definición clara de un modelo, criterio, regla de medida o de los requisitos mínimos aceptables para la operación de procesos específicos, con el fin asegurar la calidad en productos o servicios.
Los estándares señalan claramente el comportamiento esperado y deseado en los empleados y son utilizados como guías para evaluar su funcionamiento y lograr el mejoramiento continuo de los servicios, requieren ser establecidos con el fin de contar con una referencia que permita identificar oportunamente las variaciones presentadas en el desarrollo de los procesos y aplicar las medidas correctivas necesarias.
Dado el alto impacto que tienen los costos en el producto y/o servicio, las finanzas también tienen un papel primordial en la gerencia de las operaciones, con el fin de administrar el flujo de dinero, el efectivo. Esto surge del hecho de que los costos se acumulan conforme el producto o servicio se convierte de materia prima en producción en proceso y a producto o servicio terminado, por lo tanto, es necesario administrar, estandarizar y controlar en forma adecuada las materias primas, componentes y partes, y los costos laborales directos, que participan en el proceso de conversión.
Ideas Centrales
Un estándar puede ser definido como una unidad de medida que sirve como modelo, guía o patrón con base en la cual se efectúa el control. Los estándares representan el estado de ejecución deseado, de hecho, no son más que los objetivos definidos de la organización. Un estándar se puede fijar en términos de cantidad, calidad, costo o cualquier atributo del producto, de lo que resulta la base para su control.
Estandarizar nos permite optimizar recursos, reducir costos y generar ventajas competitivas para nuestros clientes.
La estandarización de los procesos
La estandarización de procesos, hoy en día es una herramienta que genera una ventaja competitiva para muchas organizaciones, las exigencias que impone el mercado globalizado, han hecho cambiar la visión del mundo y de los negocios.
El objetivo de crear e implementar una estrategia de estandarización es fortalecer la habilidad de la organización para agregar valor. Toda empresa conoce la importancia que tiene el sello de la estandarización, no sólo habla de calidad de su producto sino que al mismo tiempo le abre las puertas mercados o empresas internacionales que requieren estos estándares de trabajo.
La competitividad extrema, en la que no existen distancias ni fronteras y el hecho de que la información ha dejado de ser resguardo seguro en sus organizaciones, para estar al alcance de todos, provoca una enorme presión sobre las mismas, que deben flexibilizarse y encontrar nuevos mecanismos para afrontar las presiones, para innovar[1].
Ajustar toda una cadena productiva a un referente, crea un lenguaje común para unir las diferentes etapas, exigiendo a todos los integrantes disponer de procedimientos que permitan medir, controlar y realizar un seguimiento más preciso de los trabajos.
Estándar de producción y operaciones
La estrategia de producción y operaciones es el medio para alcanzar los objetivos establecidos de fabricación o de prestación de servicios. Dentro de la misma organización, existen estándares en los distintos niveles dentro del proceso de conversión, para producir con eficacia y eficiencia, tales como:
Estándares individuales del puesto: Evaluación de la actuación, sirve para determinar objetivamente los límites de productividad del personal de la empresa. Este estándar de mano de obra, es sencillamente lo que se espera del trabajador promedio bajo las condiciones de trabajo durante un tiempo determinado, es decir, es lo que podríamos llamar “un día normal del trabajo”.
Estándares departamentales: diversos trabajadores pueden desempeñarse como una unidad de trabajo, formando así una operación de ensamblado en grupo. Su objetivo es medir los programas de desarrollo de la gerencia, y su efectividad.
Estándares de planta: la mano de obra, los materiales y los gastos de administración, tienen estándares que deben de ser mantenidos y al mismo tiempo hay que controlar los costos y al mismo tiempo los niveles de calidad del producto o servicio.
Empleo de los estándares
Como base para tomar decisiones en las operaciones, se emplean los estándares de tiempo (mano de obra) para evaluar el desempeño de los trabajadores y de las instalaciones para realizar la predicción, planeación y control de las operaciones. Estos estándares tienen dos utilidades:
Las decisiones clave sobre la evaluación del desempeño en la administración de las operaciones, se basan en las variaciones sobre la eficiencia de la mano de obra, por lo que es gran importancia que los datos empleados en el cálculo de la variación sean correctos.
Medición de los estándares
Las personas son diferentes no sólo en sus características físicas, sino también en su ritmo de trabajo; para poder determinar un estándar de mano de obra es necesario encontrar un “trabajador promedio”, lográndolo por medio de la observación, es decir, se observarán a diversos trabajadores realizando sus actividades normales, a los cuales se calculará el desempeño promedio, es decir se hará una medición del trabajo. Por lo tanto la medición del trabajo, es la determinación del grado y la cantidad de mano de obra que interviene en actividades de producción/operaciones.
Un estándar de mano de obra, revela lo que se espera de un trabajador promedio, cumpliendo con su labor bajo condiciones de trabajo normales.
Al establecer los estándares de trabajo, la administración en general considera que la cantidad debe ser la primera en ser medida y la calidad en un estándar de carácter secundario. La cantidad se mide en general en términos de piezas por tiempo en las industrias de manufactura y en unidades de servicio por tiempo en las industrias de servicio.
Técnicas para la medición del trabajo
Básicamente hay seis formas de establecer un estándar de tiempo (mano de obra):
1.- Ignorar el proceso de medición formal del trabajo.
2.- Utilizar el enfoque de datos de experiencias anteriores.
3.- Emplear el estudio de tiempo directo.
4.- Usar el enfoque del estudio de tiempo predeterminado.
5.- Utilizar el enfoque de muestreo de trabajo.
6.- Combinar los enfoques 2 a 5.
Es necesario considerar que las fallas de los procesos pueden ser imputables por un lado a problemas propios del sistema que condiciona la necesidad de revisar su estructura y funcionamiento y por otro lado a errores cometidos por los empleados; por lo cual surge la medición del trabajo, como una herramienta que si es aplicada por personas debidamente entrenadas, dará resultados satisfactorios.
Con la medición del trabajo se puede incrementar la eficiencia y proporcionar estándares de tiempo que servirán de información a otros sistemas de la empresa, como el de costos, de programación de la producción, de supervisión etc. Por ello la medición del trabajo es una herramienta que la administración dispone para controlar la eficiencia del trabajo y de esta manera estar en posibilidad de incrementarla.
Consideraciones personales
La tarea básica de la gerencia de operaciones es tomar los insumos en forma de recursos y convertirlos en resultados en forma de productos y/o servicios. Los gerentes de operaciones tienen múltiples metas y deben de reaccionar frente a ellas con estándares múltiples; los estándares del tiempo de la mano de obra se utilizan con mucha menor uniformidad en el sector de servicios, a diferencia del sector de manufactura de bienes físicos. Como el sector de servicios en general utiliza mayor cantidad de mano de obra intensiva, se podría beneficiar mucho de los estándares de tiempo de la mano de obra.
Como consecuencia, el gerente de operaciones necesitará ofrecer cada vez más en mayor medida el apoyo esencial para incrementar la productividad, crear ventajas tecnológicas y encontrar métodos adicionales para aumentar las ganancias, por lo tanto la gerencia de operaciones es una de las herramientas que se aplica en las organizaciones y procesos, para solucionar los problemas, esto implica lo necesario que es para cualquier profesional conocer todos los aspectos relacionados con este tema.
Finalmente se puede decir que para alcanzar los objetivos de la gerencia de operaciones con un nivel competitivo, tanto a nivel de país como en el ámbito internacional, se debe estandarizar todos y cada uno de los procesos tanto en los productos y servicios ofrecidos.
[1] http://www.engenium.com.mx/estandarizacion-de-procesos
El estándar puede ser conceptualizado como la definición clara de un modelo, criterio, regla de medida o de los requisitos mínimos aceptables para la operación de procesos específicos, con el fin asegurar la calidad en productos o servicios.
Los estándares señalan claramente el comportamiento esperado y deseado en los empleados y son utilizados como guías para evaluar su funcionamiento y lograr el mejoramiento continuo de los servicios, requieren ser establecidos con el fin de contar con una referencia que permita identificar oportunamente las variaciones presentadas en el desarrollo de los procesos y aplicar las medidas correctivas necesarias.
Dado el alto impacto que tienen los costos en el producto y/o servicio, las finanzas también tienen un papel primordial en la gerencia de las operaciones, con el fin de administrar el flujo de dinero, el efectivo. Esto surge del hecho de que los costos se acumulan conforme el producto o servicio se convierte de materia prima en producción en proceso y a producto o servicio terminado, por lo tanto, es necesario administrar, estandarizar y controlar en forma adecuada las materias primas, componentes y partes, y los costos laborales directos, que participan en el proceso de conversión.
Ideas Centrales
Un estándar puede ser definido como una unidad de medida que sirve como modelo, guía o patrón con base en la cual se efectúa el control. Los estándares representan el estado de ejecución deseado, de hecho, no son más que los objetivos definidos de la organización. Un estándar se puede fijar en términos de cantidad, calidad, costo o cualquier atributo del producto, de lo que resulta la base para su control.
Estandarizar nos permite optimizar recursos, reducir costos y generar ventajas competitivas para nuestros clientes.
La estandarización de los procesos
La estandarización de procesos, hoy en día es una herramienta que genera una ventaja competitiva para muchas organizaciones, las exigencias que impone el mercado globalizado, han hecho cambiar la visión del mundo y de los negocios.
El objetivo de crear e implementar una estrategia de estandarización es fortalecer la habilidad de la organización para agregar valor. Toda empresa conoce la importancia que tiene el sello de la estandarización, no sólo habla de calidad de su producto sino que al mismo tiempo le abre las puertas mercados o empresas internacionales que requieren estos estándares de trabajo.
La competitividad extrema, en la que no existen distancias ni fronteras y el hecho de que la información ha dejado de ser resguardo seguro en sus organizaciones, para estar al alcance de todos, provoca una enorme presión sobre las mismas, que deben flexibilizarse y encontrar nuevos mecanismos para afrontar las presiones, para innovar[1].
Ajustar toda una cadena productiva a un referente, crea un lenguaje común para unir las diferentes etapas, exigiendo a todos los integrantes disponer de procedimientos que permitan medir, controlar y realizar un seguimiento más preciso de los trabajos.
Estándar de producción y operaciones
La estrategia de producción y operaciones es el medio para alcanzar los objetivos establecidos de fabricación o de prestación de servicios. Dentro de la misma organización, existen estándares en los distintos niveles dentro del proceso de conversión, para producir con eficacia y eficiencia, tales como:
Estándares individuales del puesto: Evaluación de la actuación, sirve para determinar objetivamente los límites de productividad del personal de la empresa. Este estándar de mano de obra, es sencillamente lo que se espera del trabajador promedio bajo las condiciones de trabajo durante un tiempo determinado, es decir, es lo que podríamos llamar “un día normal del trabajo”.
Estándares departamentales: diversos trabajadores pueden desempeñarse como una unidad de trabajo, formando así una operación de ensamblado en grupo. Su objetivo es medir los programas de desarrollo de la gerencia, y su efectividad.
Estándares de planta: la mano de obra, los materiales y los gastos de administración, tienen estándares que deben de ser mantenidos y al mismo tiempo hay que controlar los costos y al mismo tiempo los niveles de calidad del producto o servicio.
Empleo de los estándares
Como base para tomar decisiones en las operaciones, se emplean los estándares de tiempo (mano de obra) para evaluar el desempeño de los trabajadores y de las instalaciones para realizar la predicción, planeación y control de las operaciones. Estos estándares tienen dos utilidades:
Las decisiones clave sobre la evaluación del desempeño en la administración de las operaciones, se basan en las variaciones sobre la eficiencia de la mano de obra, por lo que es gran importancia que los datos empleados en el cálculo de la variación sean correctos.
Medición de los estándares
Las personas son diferentes no sólo en sus características físicas, sino también en su ritmo de trabajo; para poder determinar un estándar de mano de obra es necesario encontrar un “trabajador promedio”, lográndolo por medio de la observación, es decir, se observarán a diversos trabajadores realizando sus actividades normales, a los cuales se calculará el desempeño promedio, es decir se hará una medición del trabajo. Por lo tanto la medición del trabajo, es la determinación del grado y la cantidad de mano de obra que interviene en actividades de producción/operaciones.
Un estándar de mano de obra, revela lo que se espera de un trabajador promedio, cumpliendo con su labor bajo condiciones de trabajo normales.
Al establecer los estándares de trabajo, la administración en general considera que la cantidad debe ser la primera en ser medida y la calidad en un estándar de carácter secundario. La cantidad se mide en general en términos de piezas por tiempo en las industrias de manufactura y en unidades de servicio por tiempo en las industrias de servicio.
Técnicas para la medición del trabajo
Básicamente hay seis formas de establecer un estándar de tiempo (mano de obra):
1.- Ignorar el proceso de medición formal del trabajo.
2.- Utilizar el enfoque de datos de experiencias anteriores.
3.- Emplear el estudio de tiempo directo.
4.- Usar el enfoque del estudio de tiempo predeterminado.
5.- Utilizar el enfoque de muestreo de trabajo.
6.- Combinar los enfoques 2 a 5.
Es necesario considerar que las fallas de los procesos pueden ser imputables por un lado a problemas propios del sistema que condiciona la necesidad de revisar su estructura y funcionamiento y por otro lado a errores cometidos por los empleados; por lo cual surge la medición del trabajo, como una herramienta que si es aplicada por personas debidamente entrenadas, dará resultados satisfactorios.
Con la medición del trabajo se puede incrementar la eficiencia y proporcionar estándares de tiempo que servirán de información a otros sistemas de la empresa, como el de costos, de programación de la producción, de supervisión etc. Por ello la medición del trabajo es una herramienta que la administración dispone para controlar la eficiencia del trabajo y de esta manera estar en posibilidad de incrementarla.
Consideraciones personales
La tarea básica de la gerencia de operaciones es tomar los insumos en forma de recursos y convertirlos en resultados en forma de productos y/o servicios. Los gerentes de operaciones tienen múltiples metas y deben de reaccionar frente a ellas con estándares múltiples; los estándares del tiempo de la mano de obra se utilizan con mucha menor uniformidad en el sector de servicios, a diferencia del sector de manufactura de bienes físicos. Como el sector de servicios en general utiliza mayor cantidad de mano de obra intensiva, se podría beneficiar mucho de los estándares de tiempo de la mano de obra.
Como consecuencia, el gerente de operaciones necesitará ofrecer cada vez más en mayor medida el apoyo esencial para incrementar la productividad, crear ventajas tecnológicas y encontrar métodos adicionales para aumentar las ganancias, por lo tanto la gerencia de operaciones es una de las herramientas que se aplica en las organizaciones y procesos, para solucionar los problemas, esto implica lo necesario que es para cualquier profesional conocer todos los aspectos relacionados con este tema.
Finalmente se puede decir que para alcanzar los objetivos de la gerencia de operaciones con un nivel competitivo, tanto a nivel de país como en el ámbito internacional, se debe estandarizar todos y cada uno de los procesos tanto en los productos y servicios ofrecidos.
[1] http://www.engenium.com.mx/estandarizacion-de-procesos